26/10/2016 16:00:00La ingesta de las golosinas debe ser de manera excepcional en los más pequeños, especialmente porque con tres dulces, su cuerpo ya tiene el 10% de azúcar que necesita al día.En esta fiesta de Halloween los nutricionistas hacen un llamado a cuidar a los niños de los colorantes, el azúcar y también el sodio presente en las golosinas que recolectarán la noche de brujas. Lee también: 10 ideas de comida tenebrosa para HalloweenHay que tener en cuenta que sólo tres dulces en promedio equivalen al 10% de lo que ellos requieren al día. Por eso, su consumo debe ser de forma excepcional y nunca diario, pues sus componentes pueden generar sobrepeso–obesidad y enfermedades asociadas como resistencia a la insulina, diabetes, triglicéridos elevados, caries dentarias, hiperactividad en algunos niños, entre otras. La nutricionista jefe de Clínica Vespucio, Patricia Torres, explicó que los riesgos están asociados a que los azúcares se metabolizan más rápido en los niños, "son carbohidratos adicionales, provocan problemas de tránsito intestinal y también cambios en el comportamiento". Además, agregó que los alimentos procesados como el caso de los dulces y chocolates, tienen mayor adición de azúcar y sal por lo que el daño puede ser mayor en el tiempo. Algunas recomendaciones para los padres en esta noche de "dulce o truco": 1- Las comidas del día: es recomendable que ese día los niños deben tomar desayuno, almuerzo y cena para que no reemplacen las comidas importantes. Así estarán satisfechos y comerán menos cantidad de dulces antes de salir a pedir. 2- No sólo dulces: también se puede sugerir entregar obsequios que no sean dulces, como lápices y libros para colorear, masitas, plasticinas, juguetes, etc. Eso sí, deben revisar que no sean tóxicos y que tengan clara su composición y fecha de vencimiento. 3- Otras preparaciones: se pueden hacer comidas o snacks saludables para reemplazar los dulces, como brochetas de frutas, yogurt como helados y jaleas de forma entretenidas. Las frutas y verduras aportan colores que podrían ayudar a evitar colorantes artificiales para hacer figuras. 4- Qué hacer con tanto dulce: fraccione las porciones para moderar el consumo. Disminuya la ingesta de otros alimentos que adicionen más azúcar como bebidas gaseosas, galletas, chocolates o helados. 5- Deporte: ese día se pueden hacer celebraciones más temprano al aire libre, para estimular en los niños el gasto energético y la actividad física para suplir el aporte calórico de las golosinas. 6- Saber escoger: hay que fijarse en las etiquetas, hay algunos que además de azúcar tienen grasas saturadas. 7- Que no sea una recompensa: los niños son muy receptivos y podrían ver la entrega de dulces como una recompensa, esto como algo positivo o habitual por lo que luego costará más restringir su consumo.
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