09/11/2016 14:03:00La deportista dice que con la justicia social que se ha hecho tras revelar una década de abusos cuando era niña, "ya se queda tranquila". La atleta nacional Érika Olivera se refirió a la dura confesión que realizó hace unos meses, donde reveló que había sido abusada sexualmente por su padrastro por más de 10 años cuando era niña. En entrevista con 24 Horas, la medallista señaló que por ahora, todo está en un plano investigativo desde que lo denunció por presunto delito sexual. Y que además, perdió todo el contacto con su madre desde que la noticia salió en los medios. En el marco de la investigación, no busca una justicia legal, pues cree que no se podrá. "La justicia social que se consiguió ha sido bastante buena, y con eso yo me quedo tranquila. Hice lo que tenía que hacer y que estoy segura que sirvió a muchísimas personas", preció. En ese mismo plano, agregó que desde que ingresó la denuncia ante la PDI y se supo en la prensa, "perdí toda comunicación con mi mamá. Pero yo pienso que mi familia es mi marido, son mis hijos y es con ellos con quienes estoy compartiendo el día a día", precisó al canal. Olivera dijo que seguirá trabajando en temas de abuso y violación, especialmente son niños. "Haber vivido esa experiencia de niña, me pone en el lugar de quienes lo sufren hoy en día y, como mamá y mujer, me llega muchísimo".
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