miércoles, 17 de mayo de 2017

Las características de los partos respetados o humanizados

Las características de los partos respetados o humanizados

17/05/2017 7:30:00Aquí las mujeres son las protagonistas de sus partos, y quieren que éstos sean lo más naturales posibles.En varios países se celebra la "Semana Mundial del Parto Respetado", cuyo objetivo es garantizar los derechos de la mujer y sus familias durante la gestación, parto y puerperio. Aquí las mujeres son las protagonistas de sus partos, y quieren que éstos sean lo más naturales posibles, por lo que se informan y asisten a charlas para saber lo que pasa con sus cuerpos. Esta tendencia ha llevado a que tanto centros públicos como privados acondicionen salas de atención integral del parto, las cuales facilitan mantener un ambiente cómodo y respetuoso, contando con algunas características como luz tenue, música a gusto, jacuzzi y otros elementos no farmacológicos que se utilizan para el manejo del dolor. Además cuentan con espacio para facilitar la libertad de movimiento durante el trabajo de parto y permiten la compañía de los familiares cercanos si es que la mujer lo desea. Otras características de este tipo de partos son: libertad de alimentación para la madre; protagonismo de la triada en el proceso (madre-bebé-acompañante); respeto a los tiempos del nacimiento; pinzamiento y corte del cordón umbilical cuando deja de latir; favorecer el contacto piel con piel entre la madre y su hijo el mayor tiempo posible inmediatamente post parto, considerando mínimo una a dos horas, con el ideal de nunca separarlos. El académico de obstetricia, especialista en la Humanización del Parto y Nacimiento de la facultad de Medicina USS, Juan Carlos Chirino, dijo que se debe dejar de ver a la mujer como una "máquina defectuosa incapacitada para dar a luz y al nacimiento como una enfermedad y, por ende, al parto como un mero procedimiento médico, excesivamente medicalizado, sino que más bien como la culminación del proceso de gestación, un proceso de cambios psíquicos y físicos en que la mujer experimenta el amor más sagrado, la exigencia más extrema y la responsabilidad más profunda con el hijo que espera. Por lo mismo debemos acompañar y darle la bienvenida de la manera más amorosa y respetada".

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