04/05/2018 16:47:00El padre de Felipe Osiadacz y la madre de Fernando Candia emitieron un comunicado donde dijeron que no darán declaraciones a la prensa por recomendación de los abogados defensores. Los jóvenes se conocieron en Nueva Zelanda cuando trabajaban e iniciaron sus vacaciones juntos por el Sudeste Asiático, las que no concretaron.Los familiares de los dos jóvenes detenidos en una cárcel de Kuala Lumpur, Malasia, y que arriesgan pena de muerte, emitieron un comunicado donde aclararon que no hablaran con la prensa debido a la recomendación de los propios abogados que trabajan en la defensa de los chilenos en dicho país. Lee también: Dos chilenos detenidos en Malasia podrían ser condenados a la horca. Lee también:Piden a Piñera interceder por los jóvenes chilenos ante el rey de Malasia. Agregaron que están coordinando una audiencia con el presidente Sebastián Piñera para que el Estado intensifique las gestiones que logren liberar a su hijos. Fernando Osiadacz, padre de Felipe (27 años e ingeniero comercial) y Maritza Ocay, madre de Fernando Candia (30 años, chef), detallaron cómo fueron los hechos que derivaron en la prisión para los amigos y cómo ha sido este proceso desde agosto de 2017 cuando fueron detenidos. "Felipe y Fernando se vieron envueltos en un incidente con un desenlace fatal, luego de ser abordados por un malayo. Mientras Felipe estaba en el lobby del hostal y Fernando traía las llaves, el malayo le insistía que le dieran dinero", detallaron. Fue ahí cuando la situación se volvió más violenta y los chilenos pidieron al recepcionista que llamara a la policía. "Como el nivel de agresividad de esta persona aumentó, ellos se asustaron y lo inmovilizaron sin ninguna intención de causarle daño, pues todo lo sucedido fue en defensa propia", escribieron en el comunicado. El hecho ocurrió en el primer día de vacaciones de los amigos, quienes se conocieron en Nueva Zelanda donde trabajaron durante un año. "Nuestros hijos son inocentes del cargo que se les imputa. Esto no ha sido más que un terrible accidente que afectó a dos jóvenes que sólo iban a disfrutar sus vacaciones". Desde que los chilenos fueron detenidos han pasado nueve meses y han estado en prisión. "Ha sido una verdadera pesadilla para ellos y nosotros, la distancia y las diferencias culturales lo hacen aún más difícil. La angusta y el temor nos ha embargado de manera continua estos meses", indicaron los familiares. Desde Chile contrataron un estudio de abogados en Malasia, "nuestro silencio obedece a las recomendaciones entregadas por la propia defensa, quienes nos han aconsejado no abordar el tema públicamente para no afectar el proceso legal". Finalmente, también agradecieron el apoyo consular que han recibido desde el primer día, especialmente del cónsul chileno en Malasia, Juan Francisco Masón Izquierdo.
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