Fiscalía saudí pidió la pena de muerte para detenidos por asesinato de Khashoggi

15/11/2018 10:51:00La entidad ha presentado acusación contra 11 de las 18 personas arrestadas en relación al caso.El fiscal general de Arabia Saudí, Saud al Moyeb, pide la pena de muerte para cinco personas detenidas por su presunta implicación en el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en Estambul el pasado 2 de octubre, informó hoy ante la prensa en Riad un funcionario de la fiscalía. La fiscalía ha presentado acusación contra 11 de las 18 personas arrestadas en relación con el "caso Khashoggi", indicó el funcionario sin revelar los nombres de los imputados. Según el funcionario, un ex subdirector del servicio de inteligencia de Arabia Saudí es el autor intelectual del asesinato del periodista en el consulado saudí en la ciudad turca de Estambul. "Estamos esperando una respuesta de Turquía a nuestra solicitud de recibir pruebas y grabaciones de audio relacionadas con el caso", señaló. Khashoggi acudió el 2 de octubre al consulado saudí para retirar los documentos que le permitirían casarse con su prometida turca. Nunca más salió de la delegación diplomática. Tras una fuerte presión internacional, Arabia Saudí reconoció el asesinato de Khashoggi. Riad anunció que iba a realizar su propia investigación de lo sucedido El reino árabe acusó a funcionarios del Gobierno de haber enviado por su propia cuenta a un equipo especial de 15 personas a ejecutar esta misión. En total, la cúpula saudí detuvo a 18 sospechosos. Con ello se pretendía sacar al poderoso príncipe heredero del punto de mira, según los críticos. De acuerdo con Riad, el equipo especial enviado a Turquía tenía que haber persuadido a Khashoggi de que viajase con ellos a Arabia Saudí. La situación escaló y el periodista, que estaba exiliado en Estados Unidos y colaboraba con el diario "The Washington Post", recibió una inyección que le causó la muerte. Su cuerpo fue desmembrado y sacado fuera del consulado. La Justicia turca asegura que Khashoggi fue estrangulado poco después de entrar en el consulado. Su cadáver fue descuartizado. Las autoridades turcas consideran que la orden de matar al disidente procede de las altas esferas del Gobierno saudí. Ankara compartió informaciones del servicio secreto, sobre todo grabaciones.